viernes, 8 de junio de 2018

E-PORTFOLIO

¡Hola chicxs!


Comienzo a escribir esta entrada con un sabor agridulce. Se acaba este segundo año de carrera, y con él, mi andadura por el blog ha llegado a su fin. A continuación, realizaré un repaso sobre todo lo vivido este año en la asignatura de TICs.


Al inicio de curso, se nos propuso la creación de un blog en el que plasmásemos lo que íbamos haciendo y que reflexionásemos respecto a ello. Para dar comienzo al mismo, cada uno/a de nosotros/as hicimos una breve presentación, explicando quiénes somos y porqué creábamos este espacio.


Al principio, es cierto que estaba desmotivada ante este reto, puesto que el año pasado también realizamos un blog y no me gustó la experiencia. Sin embargo, esta vez ha sido diferente. Agradezco los temas que se nos han propuesto, nos han ayudado a adquirir conocimientos que sin duda nos serán de gran ayuda en nuestra profesión. Normalmente no nos hablan acerca de ellos, pero son de vital importancia.


Para dar comienzo al primer taller, denominado ¿Cómo aprendemos?, procedimos a la lectura de varios artículos y a relacionarlos con una serie de imágenes de Chema Madoz. Aquí, reflexionamos acerca del aprendizaje, tanto dentro como fuera del aula.


A continuación, continuamos reflexionando sobre cómo aprendemos nosotros y cuáles son los elementos clave para nuestro aprendizaje.


En la tercera entrada analicé un vídeo de Jordi Ardell sobre la Competencia Digital, en el que se destacaba la importancia de incorporarla en los currículums escolares, con la finalidad de promover un uso adecuado de las tecnologías.


En la cuarta entrada, compartí mi tecnografía, esto es, un vídeo en el que reflejaba a través de imágenes diferentes situaciones, lugares o personas con las que aprendo en mi día a día. Una vez que seleccioné lo que era más importante y enriquecedor para mi aprendizaje comencé a realizar la cartografía. En mi caso opté por una más visual y tecnológica , ya que como he ido comentado a lo largo de todas mis entradas, mi vida está muy ligada a la tecnología. Una vez hecha la cartografía realicé un video con la explicación de la misma y además cree un código Qr para poder tener acceso directo al video.


A la vuelta de navidades, pasamos al segundo taller sobre género y tic. Las primeras entradas estuvieron relacionadas con dos películas que vimos en clase, “La Caza”, y “Laurence Anyways”. En ambos filmes, tuvimos que elegir las escenas que más nos habían llamado la atención. El propósito era analizar la cantidad de desigualdades que nos encontramos en el mundo, y en concreto, en el ámbito de la educación.

En la novena entrada, hablé sobre el taller de robótica. Tuvimos la gran suerte de recibir en clase la visita de la empresa Habilitas Educación, especializada en robótica educacional. Aquí aprendimos la importancia del aprendizaje cooperativo para la consecución de los objetivos. Si estamos unidos, todo es mucho más fácil.


En las siguientes entradas, reflexioné sobre dos artículos, Nos empezamos a conocer los unos a los otros” y ¿Cómo aprendo a ser maestra? Repensar el género en la Educación Infantil”, los cuales los relacioné con la película de “La caza” y la de “Laurence Anyways”. En el primero de ellos se relataban los desafíos a los que se debía enfrentar una escuela para abordar el tema de la transexualidad, y las dificultades que tienen estas personas en el proceso de transición de género. El segundo, hablaba de la importancia que adquiere el género a la hora de ser docente en Educación Infantil.


Más tarde, por grupos, elaboramos un mapeo, en el que a través de un Prezi unimos las ideas esenciales extraídas de diversos textos trabajados, así como de las películas visionadas.


Finalmente, pusimos punto y final al taller de género con las presentaciones de los artefactos, en los que llevábamos trabajando varias semanas. Para su realización, hicimos uso del “Makey Makey” y el “Scratch”. Nuestro grupo quiso representar los diferentes obstáculos a los que se debe enfrentar una mujer en la sociedad: machismo, patriarcado, brecha salarial, etc. ¡Fue una experiencia muy divertida y enriquecedora!


En la decimotercera entrada di comienzo al último taller con la visualización del programa Conectados, en el que se hablaba del uso excesivo de las tecnologías.


A raíz del reportaje anterior, describí varias situaciones en la que me encontraba On-line y Off-line, y las uní con el artículo titulado “La ilusión de una vida sin internet”, de Evgeny Morozov. Aprendí la importancia que tiene para nuestra persona el dar un uso moderado a las tecnologías y proporcionarnos tiempos de desconexión.


También vimos un vídeo de Glenn Greenwald sobre la importancia de la privacidad, que nos conduce a reflexionar acerca de la exposición y falta de intimidad a la que estamos sometidos.


La siguiente actividad fue muy diferente a las anteriores, debíamos engañar a las cámaras para evitar el reconocimiento facial. Para ello, creamos asimetrías en los rostros a través del maquillaje.


Para finalizar el último taller, paseamos por el campus en busca de cámaras de vigilancia, las localizamos y nos preguntamos si son realmente necesarias y si condicionan de alguna u otra manera nuestro comportamiento. Además, siguiendo el ejemplo de Surveillance Camera Players, hicímos un performance reivindicativo, en el que denunciamos el caso de “La Manada” y transmitimos un mensaje claro: Juntas somos fuerza, si nos tocan a una nos tocan a todas.


Antes de cerrar el blog, me gustaría destacar el trabajo realizado por mis compañeras y por mí durante todo el curso. Nos hemos esforzado y dedicado plenamente en las clases, ayudándonos mutuamente, y participando en cada una de ellas. ¡Así da gusto trabajar!.


Quisiera agradecer a Aingeru sus propuestas , ya que me han permitido abrir la mente y se han esfumado de ella ciertos estereotipos que poseía. Te doy las gracias por haber hecho de mí una persona más libre respecto a mi forma de pensar, que consecuentemente afectará a mi manera de actuar. Hemos podido compartir contigo momentos de risa, de debate; y como no,  de frustraciones cuando no nos salían las cosas como queríamos.


Gracias a la asignatura, he podido aprender distintas herramientas tecnológicas que me servirán en el futuro profesional, y competencias para educar de una manera inclusiva al alumnado.

Espero que hayáis disfrutado tanto como lo he hecho yo. ¡Hasta la próxima! ¡Ha sido un placer!

miércoles, 6 de junio de 2018

CÁMARAS DE VIGILANCIA

Vivimos en una sociedad en constante vigilancia por las tecnologías. Por ello, a veces hay que reflexionar acerca de si tenemos que tomar restricciones al respecto.

Estoy segura de que alguna vez habéis pensado quién está detrás de todo lo que os rodea, ya que os habéis sentido vigilados y observados de una u otra manera.

Seguramente no sea la única que se siente incómoda con las cámaras frontales de los aparatos tecnológicos. De echo, la mayoría de personas tenemos puesta en el ordenador una pegatina que la tapa, pues no sabemos en qué momento alguien va a poder acceder a ella y vernos. Espiar la webcam de un ordenador es más sencillo de lo que parece.En la actualidad existen infinidad de softwares maliciosos especializados en recoger información de ordenadores ajenos que activan la webcam cuando están infectados. En ocasiones, las grabaciones que los denominados hackers obtienen, son expuestas, por ejemplo, en páginas webs o foros de internet, convirtiéndose así en un verdadero negocio ilegal. Otras veces, las imágenes obtenidas se convierten en un arma para chantajear a los compañeros de clase, del trabajo, etc. Por este motivo, como docentes, debemos transmitir estos peligros a nuestros niños y niñas, puesto que a estas edades son muy vulnerables.


Pero, ¿y si nos paramos a pensar en la vigilancia a la que estamos expuestos en la calle?. Nada más salir de casa, podemos encontrarnos con infinidad de cámaras de diferentes tamaños fuera de los comercios, en los transportes públicos, e incluso en determinados portales. Ahora bien, ¿hemos pensado alguna vez en todas las cámaras de seguridad presentes en nuestro campus?, ¿son necesarias?, ¿condicionan de alguna manera nuestro comportamiento?.

Para reflexionar sobre ello, Aingeru nos motivó a dar una vuelta por las diferentes facultades y detectar las cámaras de seguridad. Una vez localizadas, debíamos sacarles una foto y señalarlas en Google Maps.



Para nuestra sorpresa, encontramos infinidad de ellas, tanto dentro como fuera de los edificios. Gran parte de las cámaras del exterior estaban situadas en puntos estratégicos, es decir, en las entradas y salidas. Una vez dentro, la mayoría estaban en aulas donde había gran material tecnológico que podía ser robado.


Es cierto que muchas de ellas son necesarias para tener pruebas en caso de que se produciese una agresión o un hurto. Además, las zonas con mayor concentración de cámaras tienden a experimentar una reducción significativa de este tipo de actos. Sin embargo, crean un falso sentido de seguridad, ya que pueden grabar un crimen que está sucediendo, pero no pueden frenarlo si no hay nadie que llegue a tiempo. Además, como vimos en otra de las actividades realizadas en clase, los delincuentes pueden esquivar las cámaras, creando asimetrías en su rostro o tapando facciones del mismo.

¿Alguna de ellas estará apagada, y colocada simplemente para intimidar?. En relación a esto, comentaré una experiencia vivida hace unos años. Anteriormente estuve estudiando en Bilbao, y me alojaba en una residencia universitaria. Una mañana, tras varias horas fuera de la habitación, me percaté de que me faltaba la cartera, y otras pertenencias, tales como el dinero, las tarjetas, etc. Acudí a denunciar a la policía, y cuando ésta habló con los trabajadores de la residencia, le dijeron que las cámaras de seguridad de los pasillos donde estaban las habitaciones se encontraban siempre apagadas.

Por otra parte, me incomoda pensar que las cámaras que apuntan hacia la calle, puedan grabar parte de mi recorrido diario y descubrir dónde vivo.


Para finalizar con el taller, conocimos la historia de Surveillance Camera Players, un colectivo de Nueva York que advierte del peligro que supone estar vigilados constantemente, a través de performances, mediante las cuales protestan diferentes hechos.


Tomándoles como referencia, decidimos realizar una performance delante de una de las cámaras de la facultad, denunciando una injusticia ocurrida actualmente: el caso de “la manada”. A través de ella, quisimos transmitir un mensaje claro: no debemos echar la vista a un lado y hacer oídos sordos de los actos ilícitos que ocurren en la sociedad. Juntas somos fuerza, si nos tocan a una, nos tocan a todas. ¡LA MANADA SOMOS NOSOTRAS!. Aquí os dejo el video.




E-PORTFOLIO

¡ Hola chicxs! Comienzo a escribir esta entrada con un sabor agridulce. Se acaba este segundo año de carrera, y con él, mi andadura por...